
Los gastos de manutención son aquellos que se deben pagar para realizar la actividad laboral. Aunque el concepto está bastante claro por la mayoría de la sociedad, en la práctica surgen ciertas dudas en cuanto a cuáles son estos gastos y quién es el responsable de ellos.
Se corresponden con todos aquellos pagos necesarios para alimentarse o alojarse en una población diferente al lugar de trabajo habitual. Como el trabajador está lejos de su residencia, se cubren los gastos en hoteles o restaurantes, por ejemplo.
¿Quién debe hacerse cargo de estos gastos?
Como es lógico, los gastos derivados de la actividad corren por cuenta de la empresa. Sin embargo, lo más habitual suele ser que el trabajador haga el pago y luego le sea reembolsado el dinero.
Normalmente, se reclamarán las facturas o tickets como justificantes de pago, de forma que no cabe ninguna duda de los gastos realizados y se evita la picaresca por parte del trabajador. De todos modos, la sentencia nº 96/2020 dictamina que se puede cobrar media dieta (por valor de 26,67 euros) en caso de que haya un desplazamiento sin pasar la noche, independientemente de que haya pagos o no.
En ningún caso deberá encargarse el trabajador de este gasto. Lo que hay que evitar es la actividad laboral le cueste dinero a la persona, ya que es una responsabilidad de la empresa a todas luces.
Ejemplos de gastos deducibles para los autónomos
El caso de los autónomos es algo más complejo, ya que al no contar siempre con una empresa a la que poder adjudicar los gastos, la deducción funciona de otra manera.
Eso sí, existen diferentes gastos deducibles, siempre y cuando estén relacionados con la actividad económica del trabajador y puedan ser justificados con una factura. Además, se exige como requisito introducirlo en el libro de gastos del autónomo.
Por ejemplo, se podrán deducir los consumos de explotación relacionados con la actividad, así como la contratación de profesionales, como un abogado o gestor.
Además, si trabajas desde casa, se entiende que un porcentaje de los suministros domésticos están destinados a tu actividad laboral, por lo que podrás deducir un 30% de las facturas de electricidad, gas, agua, teléfono y conexión a Internet.
Las dietas para el autónomo
De nuevo, la situación del trabajador autónomo supone una serie de condiciones más complejas que las de aquellos que están contratados por una empresa. Sin embargo, la cuantía es la misma que hemos comentado anteriormente: 26,67 euros cuando no hay pernocta (48 euros si es en el extranjero) y 53,34 euros si haces noche fuera de la población de tu domicilio fiscal dentro de España y 91,35 euros en el extranjero.
Son muchos los trabajadores autónomos que no tienen en cuenta esta circunstancia y no reclaman estas dietas. Sin duda, contratar una persona especializada en este tipo de asuntos es fundamental para evitar que se pasen por alto estas deducciones.
Nuestra experiencia en el sector y en el trato con trabajadores autónomos nos permitirá mantenerte al día de todos aquellos gastos que son susceptibles de una deducción considerable. Contacta con nosotros y te informaremos de todo lo necesario para saber que necesitas la figura de un gestor para no errar con las dietas y gastos de manutención.
Generalmente, los autónomos tienden a dejar de lado todo lo referente a la contabilidad y los asuntos fiscales para concentrarse en su actividad económica. Lógicamente, esa es la mejor vía de ingresos que puede tener un trabajador por cuenta propia, pero no hay que dejar de tener en cuenta que se pueden ahorrar muchos gastos con las deducciones. Además, con un gestor no tendrás tantos dolores de cabeza y será más fácil de llevar todos los números, que no son pocos.
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